
Algo que va más allá de todo lo real.
Dejarse guiar en un mar tempestuoso
Sin nadie que maneje el timón
Ni quién decida lo que será.
Sin miedo a naufragar.
Sin importar quedarse en la orilla,
Si se retorna a otro puerto.
Las luces de los sentidos se encienden.
Dan brillo a sueños y anhelos.
Sentir, de esta manera, que no es la de todos
Extraña, especial con un encanto sutil e irresistible.
Ser amigos, confidentes, súbditos de deseos
Y, como veleros en libertad, surcar nuevas rutas
Invitados a sonreír, en ese tiempo
En el que, el mañana aún no está escrito.
3 comentarios:
Bonito poema, precioso canto a la libertad. Me ha recordado a una vieja canción de Espronceda, sólo que tus versos hablan de compartir, es decir, de más de uno y los suyos eran más individualistas.
Espero seguir compartiendo tus viajes, tus versos y tus reflexiones.
se amigos, confidentes, subditos de deseos...
Muy bonita, a mi es hablarme de tomar nuevos rumbos y ya me emociono...
por cierto me encantan tus mariposas
y lo de la selección musical, te paso mi mail y ¿me envías los links?
anabelyu@gmail.com
También si quieres te invito a mi blog, lo tengo cerrado hasta nueva inspiración, no es por ser maleducada, eh!
Bueno, espero, si te apetece.
*:*
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