INTERNET, UNA PUERTA ABIERTA AL MUNDO

Internet, está cada día más presente dentro de la comunicación global, con gran cantidad de recursos innovadores y la multiplicidad de soportes deja obsoletos a los antiguos medios de comunicación. En la parte relacionada con las empresas, grandes o pequeñas, las asociaciones, las administraciones publicas o un simple usuario, son muchos los métodos de gestión centralizados y sistematizados disponibles. En tiempo real facilitan la gestión y administración de las mismas.

Dentro de la gran oferta de contenidos que ofrece Internet, sin duda uno de los más utilizados son las llamadas redes sociales, donde podemos encontrar nuevas herramientas de comunicación que facilitan el contacto con personas y nos abren unos canales de comunicación impensables hace unos pocos años.

Conocemos a través de diferentes medios a personas con las cuales las relaciones se desarrollan dentro de contextos inhabituales, nuestras preferencias se tiñen de colores particulares y surgen todo tipo de relaciones, profesionales, amorosas, amistosas etc.

En una ocasión una de las personas más interesantes que he tenido ocasión de “conocer” en el entorno de estas redes, me decía como veía él este medio:

Este "supra-mundo" de relaciones humanas es un modo, único en la historia, de abrirse a horizontes de escala planetaria sin moverse del propio asiento. En sus inmensas posibilidades, se configura como un modo interactivo de pasar el tiempo libre, más allá de la pasividad de la televisión. Hay personas que utilizan la red como un modo más para escapar de su realidad cotidiana. Desean sentir que eligen -de nuevo- a pareja, amistades, compañeros, que vistos a distancia parecen más atractivos que los más cercanos. La amistad o el "amor" vía informática ofrece algunas ventajas respecto a la relación directa: da la sensación de compañía sin las molestias del roce diario; los posibles defectos de un ciberamigo no se conocen ni se sufren.

Me parece una muy buena definición de lo que puede ser este mundo, añadiría que, es dejando conocer lo que somos verdaderamente y lo que guardamos que podemos llegar a acercarnos sinceramente a los otros.

Este medio, que permite percibir la esencia de la persona, su pensamiento, su sentir, plasmado a través de una pantalla, y que posiblemente nunca lleguen a conocerse, se encuentran por afinidades de intereses, de profesiones, de preferencias políticas, edad o por simple azar. El interés hacía una persona se desarrolla a partir del momento en el que se ha establecido un estado de “ bonne entente”.

Existen no sólo amistades sino intercambios afectuosos con todo tipo de contenidos, todo depende de la forma con la cual se haya establecido la comunicación en cada ocasión. Puede resultar difícil analizar todas las sensaciones que pueden traspasar la pantalla, se crea un entendimiento ligero, sin el lastre de las posesiones habituales, una comunicación cuyo peso no aplasta , ni atosiga y que, dentro del sentido común y la condición particular de cada persona, puede ser amable, divertido, agradable, sin pretender interferir en nada.

Expresarse con el deseo de ser uno mismo, al margen de todo lo cotidiano, pero conscientes de la realidad.