Hacía tiempo que no veíamos en la gran pantalla una comedia musical romántica, y curiosamente parece un clásico comparable a “ Ha nacido una estrella o Los paraguas de Cherbourg” pero con la frescura de la actualidad y desde luego contando con la ayuda de las tecnologías que completan las interpretaciones de los actores con planos y fotografías de ensueño.
La la Land, es un musical alegre, suave, sin estridencias, los protagonistas desde la primera secuencia gustan a los espectadores, la historia no es algo nuevo, Ryan Gosling el protagonista da vida a un pianista de jazz que intenta ganarse la vida con su música y Emma Stone una aspirante actriz que trabaja como camarera intentando conseguir el gran papel de su vida. Ambos transmiten perfectamente sus sueños y deseos ………..pero…….quizás Damien Chazelle debería haber optado por otro final!!!
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